VALORES APRENDIDOS EN PANDEMIA (2020)

Este año he aprendido que tanto la pareja como las relaciones con amigos, familiares, allegados, etc., tienen un incalculable valor.

He aprendido que, aunque no estén cerca, aunque no los puedas abrazar, besar, tocar o acariciar, te hacen sentir que formas parte de su vida en este gran viaje repleto de aventuras que es la vida.

La soledad me ha hecho entender que llegó el momento de abandonar la creencia de que, por derecho, nos tienen que dar sin condición lo que no supieron enseñarnos: que podíamos darnos a nosotros mismos sin crear deudas emocionales, desde la carencia, la falta de cariño, confianza, respeto, apoyo, etc.

La soledad me ha hecho entender que llegó el momento de abandonar la creencia de que, por derecho, nos tienen que dar sin condición lo que no supieron enseñarnos: que podíamos darnos a nosotros mismos sin crear deudas emocionales, desde la carencia, la falta de cariño, confianza, respeto, apoyo, etc.

La sociedad nos enseñó que el amor solo era posible recibirlo a través de otras personas.

Interpretamos que cuidarse o amarse a uno mismo era sinónimo de egoísmo y, por ende, buscamos desesperadamente aprobación en una pareja, en amigos o en grupos de personas en los que poco a poco vamos perdiendo el interés, la ilusión y la confianza por no cubrir nuestras expectativas de llenar un hueco sin fondo que se convierte en vacío existencial.

Si perdiéramos ese pánico, si dejáramos atrás ese miedo al vacío y valoráramos lo importante que es estar a gusto con nosotros mismos, con respeto, paciencia, cariño y aceptación, encontraríamos una forma nueva de sentirnos plenos sin la necesidad de recibir esas carencias desde afuera. Así nuestras relaciones sociales serían menos dependientes y nos relacionaríamos desde la riqueza de compartir, acompañar y disfrutar; y no desde la necesidad.

Cuando el amor rebosa en ti ayudas a recargar en tiempos complicados el desgaste que por circunstancias como las que estamos viviendo en esta pandemia muchos están soportando por la pérdida, la soledad y la enfermedad.

En estos meses he observado a mi alrededor falta de lo que yo denomino: “dulzura y amabilidad” hacia nosotros mismos.

Esta carencia de no darnos agravada por la situación actual de desgaste tan dilatada en el tiempo ha derivado en una distorsión en forma de agresividad reproches intolerancia y polarización.

Muchos hemos perdido el rumbo por no recibir las dosis a las que estamos tan acostumbrados de “cianuro” que no es otra cosa que dependencia emocional.

El mejor antídoto en estos tiempos ha de ser la paciencia el apoyo el respeto la empatía y la compasión entre otros muchos valores.

Es cuando me doy sin esperar a recibir nada a cambio y acompaño a otros sin juicio sin deuda desde la abundancia de lo que sí tengo desde lo que soy cuando recibo el mayor regalo: la gratitud y el bienestar.

Con todo este trabajo de cuidado cariño y aceptación llegamos a ser firmes teniendo presente lo que verdaderamente es importante para mí dando valor y sentido a mis decisiones y acciones. De esta manera se diluye mi enfado cuando sé que he hecho lo correcto así siento que mi herida desaparece.

Cuando siento de nuevo el vacío me pregunto:

¿En qué momento aprendí que no podía solo?

¿En qué momento me enseñaron que ser feliz era algo que debía exigir a los que tenía cerca?

¿En qué momento me convencí de que todo el dolor era provocado desde fuera a causa de lo que no me daban porque yo todo lo merecía?

¿En qué momento aprendí a no ser responsable de mí mismo?

¿En qué momento aprendí a no valorarme amarme y respetarme por lo que soy?

¿En qué momento aprenderé a responsabilizarme a ser libre y feliz?

Llegó la hora de desaprender reflexionar y volver a aprender.

Ahora es el momento de estar en paz contigo para que el mundo esté en paz contigo.

Recuerda como es adentro es afuera.


 EL VALOR DE 2020 ERES TÚ.

EL VALOR DE 2020 ES LO QUE COMPARTES DE MANERA PRESENTE Y EN LA DISTANCIA.


LIBÉRATE

Sesión online y presencial de Coachingxvalores:

¿Qué conseguirás?

  • Saldrás con tus valores claramente identificados.
  • Los habrás priorizado y tendrás clara la jerarquía de tus valores y cómo te están afectando en tu día a día.
  • Detectarás posibles incongruencias entre ellos y obtendrás el método para eliminarlas.
  • Experimentarás cómo este modelo te va a facilitar enormemente la tarea de producir cambios duraderos.
  • Sentirás la potencia que tiene trabajar con valores y cómo ayuda a desbloquear situaciones encalladas.

¿Qué son los valores?

  • Los valores generan emociones. Los cambios vienen generados por lo que hacemos con esas emociones. 
  • Son conceptos mentales relativos a cada persona que una vez llevados a la acción se hacen sólidos, y eso es lo que conforma la personalidad de cada uno.
  • Son la energía que hay detrás de nuestras metas.
  • Los valores ayudan a que nos comprometamos.

 




Javi Muñoz

Terapeuta Transpersonal

Certificado Internacional en Coachingxvalores

Instructor de Yoga

Para más información:

 646 455 598        reivajm@hotmail.com


Sígueme en mis redes sociales

 (pulsa sobre el icono)